El 23 de enero de 1994, en el barrio obrero La Chinita, del municipio de Apartadó, Antioquia. Se reunían varios habitantes de la zona para departir en una ‘verbena’ con el fin de recolectar fondos para la compra de unos cuadernos escolares para la comunidad.
En ese momento, el frente 5 de las FARC ingresaron al territorio y asesinaron a 35 personas. Silvia Berrocal, víctima de la masacre, aún recuerda con nostalgia, pero con esperanza a su hijo Alcides Lozano a quién asesinaron en estos hechos.
La esperanza renace en La Chinita
<<Después de 27 años nos sentimos bien porque hemos avanzado no nos hemos quedado quietos, ni quietas para salir adelante, nos sentimos afortunados porque hay muchas personas que nos han apoyado>>
Silvia Berrocal, lideresa y víctima en la masacre en El Salado
La comunidad de La Chinita asegura que aunque falta una reparación individual, la reparación colectiva avanza por buen camino, pues la Unidad de víctimas les ha brindado la ayuda psicosocial requerida. «Nunca vamos a olvidar a nuestros familiares, pero ya los recordamos sin ese dolor que sentíamos antes» nos comenta Silvia.
Aún queda camino por recorrer para llegar a la reparación integral en la Chinita
<<Falta mucho camino por recorrer, a nosotros nos falta saber la verdad, entonces esa parte nos falta porque para nosotros es una parte de reparación>>
Silvia Berrocal, lideresa y víctima en la masacre en El Salado
Hace algunos días, se conoció que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos admitió la denuncia de un grupo de víctimas de esta masacre. En esta denuncia, las víctimas responsabilizan a las autoridades civiles y militares de contribuir con su omisión, al desatender los pedidos de protección que los habitantes de la zona hicieron.
Aunque la justicia colombiana reconoció la responsabilidad del Estado, la defensa del grupo de víctimas que presentó la denuncia asegura que no se han iniciado investigaciones penales o administrativas eficientes encaminadas a identificar a agentes o ex agentes del Estado involucrados.
Silvia por su parte asegura que este es un avance importante pues les da, a la comunidad, la esperanza de que la comunidad internacional presione al gobierno para avanzar en la reparación integral a las víctimas.
<<Esperamos con todo esto poder tener una catedra de paz, que se nos repare individualmente y que se gestione los proyectos productivos para todos y todas. Nosotros creemos en el proceso de paz y no perdemos esa esperanza de que sepamos la verdad y que hoy no nos miren como las víctimas, sino como sujetos de derechos y nos den lo que nos corresponde.>>
Silvia Berrocal, lideresa y víctima en la masacre en El Salado
Estas son algunas de las imágenes del acto temprano de reconocimiento de responsabilidad que se realizó en Apartadó antes del plebiscito por la paz. Aquí el video del acto
