Puerto Leguízamo. Fotografía Kyenike.
El viernes 1 de abril a través de un informe publicado en su página web la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz remarcó las contradicciones producidas por el Ejército Nacional y el Ministerio de Defensa acerca de la masacre en el municipio de Puerto Leguízamo, Putumayo.
Testimonios de la comunidad de la vereda el Remanso siguen produciéndose afirmando que la incursión llevada a cabo el pasado 28 de marzo no ha sido una operación militar contra disidencias de las extintas FARC, sino una verdadera masacre contra civiles que acabó con la vida de once personas.
“Testigos confirmaron que el lunes 28 de marzo hacia las 7:00 a.m. durante aproximadamente veinte minutos unos veinte hombres armados incursionaron vestidos de negro, algunos de ellos encapuchados, disparando de manera indiscriminada contra pobladores que aún se encontraban en el sitio donde se desarrollaba la fiesta comunitaria dentro de un bazar”.
Estas declaraciones desmienten la información oficial producida por el Ministerio de Defensa y ponen al mismo en una grave situación de perjurio. El video publicado por Diego Molano, Ministro de Defensa, en pro de la versión oficial de operación militar contra guerrilleros, sería falso y no mostraría la vereda El Remanso, lugar donde se produjo la masacre.
“Las fotos y videos borrosos y nada claros, son pruebas endebles que pretenden ocultar el verdadero rostro de una acción militar arbitraria, desproporcionada, y violatoria de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, una operación que, en un racional Estado de Derecho, jamás habría ocurrido”.
La Comisión de Justicia y Paz, finalmente, llama a “una intervención internacional” para garantizar el derecho, ya que la masacre llevada a cabo por el Gobierno y el Ejército viola el Derecho Internacional Humanitario.
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